Resulta que ahora nuestros parlamentarios de derechas, por aquello de que ya no tienen que disimular con aquella tontería de ser de centro, exhiben algo más de su nacionalismo aldeano (no existe fascismo más ridículo y gañán que el de este país) y se empeñan en ponerle letra al himno ezpañó. Se conoce que quieren algo que poder cantar en el fúmbol...
Sigue en
*BAJO EL VOLCÁN*